Proyección de la imagen
Conseguir que una multitud de gente pudiera ver la misma imagen al mismo tiempo fue un paso importante en el desarrollo de la fotografía. La linterna mágica se inventó a mediados del siglo XVII, pero no se popularizó como medio educativo y de entretenimiento hasta la época victoriana. Las imágenes se realizaban como impresiones sobre vidrio, llamadas “positivos”, que dejaban pasar la luz.
Una lámpara de gas o de aceite con varias mechas irradiaba luz, que era recogida por un espejo y una caja de luz y se reflejaba en la transparencia. Una lente proyectaba la imagen en una pared o una pantalla blanca. A finales del siglo XIX este método de proyección era la principal fuente pública de información visual sobre el extranjero y a veces sobre aspectos del propio país, como la arquitectura. La linterna mágica sentó las bases del proyector de diapositivas y de las ampliadoras de fotografías. |
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